Mensaje de la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina; de la secretaria del Medio Ambiente, Julia Álvarez Icaza Ramírez; de la alcaldesa de Azcapotzalco, Nancy Núñez Reséndiz, en el evento por el Día Mundial del Árbol
Transcripción de las palabras de la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina; de la secretaria del Medio Ambiente, Julia Álvarez Icaza Ramírez; de la alcaldesa de Azcapotzalco, Nancy Núñez Reséndiz, en el evento por el Día Mundial del Árbol.
JEFA DE GOBIERNO DE LA CIUDAD DE MÉXICO, CLARA BRUGADA MOLINA (CBM): Gracias, muchas gracias, gracias. Me da mucho gusto venir a Azcapotzalco. Y más gusto, venir al pueblo de Santa Catarina. Pero más gusto, venir a la sombra del ahuehuete. Aquí estamos haciendo este encuentro.
Saludo con mucho cariño a nuestra alcaldesa Nancy Núñez, un fuerte aplauso.
Bueno, pues el día de hoy estamos en un momento muy importante, porque vamos a hacer una declaratoria como Gobierno de la Ciudad, que tiene que ver con los árboles. Mañana es Día del Árbol.
Desde hoy hacemos esta declaratoria y decidimos venir a Azcapotzalco, porque es una de las alcaldías con más historia. Miren ustedes. El ahuehuete tiene la misma cantidad de años que la ciudad de Tenochtitlán: 700 años.
Este año estamos conmemorando los 700 años de Tenochtitlan. Y aquí en Azcapotzalco tienen una historia muy importante. Tienen sus pueblos originarios, tienen barrios y tienen árboles que hay que conmemorar.
Venimos hoy entonces a rendir homenaje a los árboles de la ciudad. Hay que rendir homenaje a ellos, que nos garantizan vida.
Escuché los testimonios tan lindos de este video del ahuehuete. Y no hay más que coincidir con todo lo que dijeron: un árbol que es querido por su comunidad; un árbol que es reconocido, defendido, cuidado, y todos coincidimos: los árboles son vida y tenemos que cuidarlos. Los árboles nos dan oxígeno y gracias a los árboles, hoy estamos aquí.
También los árboles son testigos de la historia. Hay quienes siembran un árbol cuando nacen sus hijos o hay quienes crecen acompañados con los árboles de la calle, en fin. Entonces, el árbol no es un ornamento, no es un lujo. El árbol es vida. Los árboles son vida. Y el día de hoy vamos a hacer una declaratoria y vamos a dar a conocer un plan estratégico para la protección y conservación del arbolado urbano de la Ciudad de México.
Miren ustedes, la población debe tomar conciencia sobre la importancia de tener árboles. Y la importancia de reforestar y tener más árboles en la ciudad, pero cuando llega uno a una calle y decimos: "¿dónde plantamos un árbol?" Nadie quiere un árbol afuera de su casa.
Entonces, tenemos que repensar esto. Es más, cuando vamos al Casa por Casa, la gente nos pide: “quiten los árboles, porque sus raíces ya rompieron esto, porque sus raíces ya hicieron lo otro”.
Imagínense ustedes, una de las demandas más grandes de la gente, es los problemas con los árboles.
Entonces, tenemos que tomar conciencia sobre la importancia de los árboles en la Ciudad de México.
Y por eso, es lo primero que vamos a hacer. Fíjense que cuando fui alcaldesa de Iztapalapa, lo hice. Cuando fui alcaldesa de Iztapalapa, lo primero que hice fue un censo. Le llamé “conteo de árboles urbanos”.
Ahora lo vamos a hacer en toda la Ciudad de México y vamos a hacer un inventario de lo que existe en la Ciudad de México, de cada árbol, y vamos a tener el diagnóstico del árbol. Porque no sólo lo vamos a hacer para tener la cifra de cuántos árboles hay, sino también saber la especie de los árboles, pero sobre todo, la situación de los árboles.
Hay árboles que están en riesgo en la Ciudad de México. Entonces, necesitamos saber cuántos árboles están en riesgo y en dónde están. Por lo tanto, lo vamos a tener de manera georreferenciada.
También nos va a decir esta investigación, esta actividad que vamos a hacer, este censo, este conteo, este inventario, los árboles que tenemos que cuidar más; las podas que se tienen que hacer a los árboles, su mantenimiento, cuáles árboles ya están secos, y si por lo tanto los tenemos que quitar porque son un riesgo, en fin. Vamos a saber qué pasa con cada árbol de la ciudad.
Pero esto, pues no es tan rápido, no se hace en un mes, se hace en un año. Y de todas maneras, vamos a seguir trabajando con todos los árboles, pero en un año vamos a tener ya este resultado. Y le vamos a decir a las alcaldías que nos apoyen; que nos apoyen, que destinen recursos para las podas de los árboles.
este resultado y le vamos a decir a las alcaldías que nos apoyen, que nos apoyen, que destinen recursos para las podas de los árboles.
Asimismo, instruyo a la Secretaría de Medio Ambiente y a la Secretaría de Obras y Servicios de la ciudad, para que haya más recursos destinados al mejoramiento, mantenimiento, a la poda de los árboles, pero también a retirar los árboles que están dañados o a los que provocan riesgos.
Eso es lo que tenemos que hacer, y a eso nos vamos a dedicar. Así que, vamos a hacer ese conteo de todos los árboles de la ciudad.
Y también vamos a seguir haciendo reforestación. Me decía la alcaldesa Nancy, que ellos en Azcapotzalco, aquí mañana van a festejar el Día del Árbol, sembrando árboles, plantando árboles. Entonces, eso es lo que hay que hacer.
Deberíamos, ya con el censo, tener programado con las alcaldías, cuántos árboles más debemos de tener, y aprovechar la época de lluvias para reforestar.
Y con los niños y niñas, fíjense ustedes, el Día del Niño convoqué a las niñas y niños a una entrevista, una audiencia con la ciudadanía infantil, es decir, con los niños y niñas y la mayoría lo que me propuso, fue plantar árboles y entonces los niños y niñas están puestos, sólo necesitan de nosotros apoyo para llevar a cabo.
Bueno, entonces vamos a seguir reforestando, vamos a atender riesgos, vamos a controlar plagas y enfermedades, y vamos a diseñar la infraestructura, así se le llama, la infraestructura verde, que fortalezca nuestra resiliencia ecológica.
Bueno, y además de este informe que quería darles, de este plan que vamos a hacer, me emociona profundamente anunciar, que vamos a abrir una convocatoria ciudadana, para que en esta ciudad se puedan nominar a árboles patrimoniales como el que tenemos aquí, para declararlos como tal: árboles patrimoniales.
El día de hoy, el día de hoy declaro Árbol Patrimonial a este ahuehuete que tenemos en el pueblo de Santa Catarina, a esta hermosa especie que tenemos aquí.
Y también hay 12 especies más, que ahorita lo van a ver ustedes en las pantallas, en distintas partes de la ciudad, que cumplen con las condiciones para declararlos árboles patrimoniales.
Y por eso estamos aquí el día de hoy. Este árbol se llama Viejo del Agua, porque es el nombre en náhuatl. Y ahuehuete significa eso: Viejo del Agua. Y así lo vamos a llamar: el Viejo del Agua que tiene en su pueblo.
Recordemos que los ahuehuetes fueron el árbol favorito del emperador Tezozómoc, y son símbolo de sabiduría y de buen gobierno.
Y entonces, ¿quién plantó este ahuehuete? Lo plantaron los Tepanecas, que vinieron a fundar aquí Azcapotzalco.
El día que se fundó, el año en que se fundó, también la ciudad de Tenochtitlan. O sea, tiene 700 años este gran árbol.
Y sigue en pie como guardián silencioso de nuestra historia. Así que por eso, esta declaratoria a este árbol.
Aquí tenemos un conjunto de árboles que le voy a pedir a la secretaria de Medio Ambiente, que con su equipo, démosle un aplauso a la secretaria de Medio Ambiente, Julia Álvarez Icaza, que ha estado en este gobierno, apoyando definitivamente al medio ambiente de esta ciudad.
Estoy muy orgullosa, querida Julia. Y también nos acompaña el secretario de Gobierno, de la Ciudad de México, César Cravioto, aquí está con nosotros. Y también está la Consejera Jurídica Eréndira Cruzvillegas.
Asimismo, saludamos al niño, la niña y las biólogas que están presentes. Y reitero mi cariño a la alcaldesa de Azcapotzalco, Nancy Núñez, que me da tanto tanto gusto, que nos está demostrando ser una buena gobernante para Azcapotzalco, una buena alcaldesa.
Y bueno, entonces el día de hoy abrimos el proceso participativo de la ciudadanía, de toda la capital, para proponer árboles como éste; para que se declaren árboles monumentales y también se elijan los nombres de árboles.
Que hagan propuestas en una plataforma, que se nomine cada árbol, con las propuestas de nombres. Y en esa misma plataforma, se quede el nombre que tenga más votos en la misma, por la misma vía, por la plataforma digital. Vamos a invitar a que la ciudad reconozca sus árboles. Ningún árbol monumental como éste, pasa desapercibido. Todos nos damos cuenta de los gloriosos árboles que tenemos en la ciudad.
A ver, denle el micrófono a la secretaria de Medio Ambiente, para que vaya presentando uno a uno, los 12 árboles más, que tenemos. Además del ahuehuete al que venimos hoy a declararlo físicamente. A ver, adelante.
SECRETARIA DEL MEDIO AMBIENTE, JULIA ÁLVAREZ ICAZA RAMÍREZ (JAIR): Con su permiso, jefa de Gobierno, como bien lo dice la jefa de Gobierno, hoy, además de este hermosísimo ahuehuete de 700 años, se declaran como árboles patrimoniales otros 12 árboles en la Ciudad de México, que voy a enumerar rápidamente
Por supuesto que muchos de ellos son ahuehuetes, que además nos enorgullece enormemente, porque el ahuehuete es el árbol nacional.
Entonces, es hermoso que varios de ellos sean ahuehuetes.
El primero, además de éste, es otro ahuehuete que se encuentra en avenida Marina Nacional en Tacuba, en la alcaldía Miguel Hidalgo, perdón.
El segundo es otro ahuehuete monumental que se encuentra en el Eje 1 poniente, en la colonia Guerrero, en la Cuauhtémoc, también.
El tercero es otro ahuehuete, ahí pueden ustedes ver sus raíces gigantescas, su follaje hermoso, que está en la calle 20 de Agosto, en San Diego Churubusco, esto en Coyoacán, en una plaza muy parecida a ésta, a espaldas del Metro General Anaya, ahí también hay un ahuehuete monumental de más o menos 500 años.
El cuarto es otro ahuehuete también en la Roma Sur, en la Cuauhtémoc. Éste es un árbol precioso que también los vecinos de la Roma Sur lo quieren muchísimo y han pedido durante años que se declare como Árbol Patrimonio de la Ciudad.
El quinto es un laurel de la India, que está en la colonia Tlacoquemécatl del Valle, en la alcaldía Benito Juárez, en la calle de Miguel Laurent número 48, que es también un árbol muy importante y muy apreciado por los vecinos de la Benito Juárez.
Éste es otro ahuehuete que se encuentra en el Parque España. Este también es un ahuehuete muy simbólico del Parque España, en la colonia Condesa, en la alcaldía Cuauhtémoc.
El séptimo va a ser otro ahuehuete. Éste está en Xochimilco. Éste es un árbol también más o menos de la misma edad que éste, es un árbol monumentalísimo, que pronto iremos, en cuanto se elijan los nombres, iremos a develar las placas para ponerles los nombres que la ciudadanía elija a estos árboles.
Éste es un fresno que está en la famosa avenida de Francisco Sosa, en el centro de Coyoacán, en el Barrio de Santa Catarina y éste es un conjunto de fresnos, pero éste es el de mayor edad, que se encuentra en esta calle y que hace de esta calle una de las más arboladas de la Ciudad de México.
El noveno es otro ahuehuete que se encuentra en el Barrio de Santa Catarina, un barrio con un nombre homólogo a éste y que también está en una plaza muy bonita, muy simbólica del centro de Coyoacán, y es un ahuehuete muy antiguo también, y en muy buen estado de salud.
El 10, es otro ahuehuete que está en la Glorieta de los Ahuehuetes, aquí el famosísimo Viejo del Agua que ustedes conocen. Viejo del Agua, que estamos muy contentos.
El 11 es otro ahuehuete que está en la Tabacalera, en la Cuauhtémoc.
Y el 12, finalmente, el 12 es el siguiente que ustedes elijan, así que nominen un árbol, recuerden que ya está la plataforma abierta, y cualquier árbol que cuente con ciertas características, lo pueden nominar y como dijo la jefa de Gobierno, arranca el proceso participativo para ponerles un nombre a estos árboles, que ya están en esta declaratoria.
Muchas gracias.
CBM: Queremos entonces para finalizar, proteger nuestro legado ambiental en la Ciudad de México. Eso es lo más importante.
Queremos que esta gran Ciudad de México, cada vez sea una ciudad más verde y más viva. Y por eso es el llamado a cuidar a los árboles, a tener más árboles y saber además qué árboles son los que podemos plantar en la ciudad.
Árboles cuyas raíces sean profundas, que nos extiendan para que la gente pueda vivir en convivencia con los árboles sin problemas; que sean de preferencia árboles nativos, para que no se sequen o no generen problemas.
Así que, vamos a seguir trabajando por la transformación. Vamos a repetir la declaratoria.
Si todos nos ponemos de pie, por favor.
Entonces vamos al final. A decir: ¡viva el Viejo del Agua! O el ahuehuete, como le conocen aquí. ¿Viejo del agua? Viejo del Agua, al final vamos a decir todos Viejo del Agua.
Hoy 27 de junio de 2025, en compañía de los vecinos del pueblo de Santa Catarina y de su alcaldesa Nancy Núñez, de las secretarias y secretarios del Gobierno de la ciudad, declaramos a este ahuehuete, Árbol Patrimonial de la Ciudad de México y lo nombramos Viejo del Agua.
¡Viva!
Muchas gracias. Muy bien.
ALCALDESA DE AZCAPOTZALCO, NANCY NUÑEZ (NN): Les saludamos con mucho gusto y recibimos, como siempre, con todo el entusiasmo y agradecimiento a nuestra jefa de Gobierno, Clara Brugada.
Un aplauso, porque siempre es un placer. A nuestra secretaria Julia, a nuestra consejera.
Azcapotzalco ha estado muy preocupado. Hemos estado trabajando muy de la mano con Sedema para varias acciones, pero hoy ésta, es muy importante.
Sabemos, no sólo para el pueblo de Santa Catarina, sino para los pueblos aledaños, los pueblos hermanos de Santa Bárbara, de San Andrés, de Santo Tomás y para todo Azcapotzalco, lo importante que es este ahuehuete que tenemos en Azcapotzalco, es además de un orgullo, un patrimonio.
Por ahí sabemos que están vecinos y vecinas ñ, que además han estado preocupados desde hace muchos años, en conservar los ahuehuetes que tenemos en nuestra alcaldía.
Y se han escuchado las voces y hoy nuestra jefa de Gobierno viene a declarar patrimonio este ahuehuete de Santa Catarina.
Y quiero decirles que es el primero de 10, que se declararán en la ciudad.
Para nosotros es un orgullo y siempre estamos muy agradecidos que volteen al norte de la ciudad, que vean también lo que tenemos en Azcapuzalco.
Ahora hemos estado trabajando muy de la mano con el Gobierno de la Ciudad de México, y agradecemos, muchas gracias, Lupita, que estás aquí, que sabemos que es siempre una luchadora por los ahuehuetes.
Y a todos los pueblos y barrios representantes que tenemos aquí, les damos la bienvenida.
Y pues, nos toca hacer lo propio. Gracias, jefa de Gobierno. Y en este día Mundial del Árbol, que es mañana, pero hoy iniciamos estas conmemoraciones, y todos los días, el compromiso por luchar por estos grandes seres.
Muchas gracias.
Bienvenida, jefa de Gobierno y gracias.
JAIR: Buenas tardes a todas y a todos. Con su permiso, jefa de Gobierno, alcaldesa, consejera jurídica, arboristas y niños de las escuelas aledañas y jóvenes de la alcaldía Azcapotzalco.
Estoy muy contenta de estar aquí el día de hoy. El tema del arbolado urbano es tan apasionante como retador e importante en la agenda de una ciudad de las características de esta naturaleza.
Mucho hemos hablado del Suelo de Conservación de la Ciudad de México, y no dejaremos de hacerlo en el sur de la ciudad. Sin embargo, en vísperas del Día Mundial del Árbol, lo dejaremos por un ratito a un lado, para enfocarnos principalmente en algo también fundamentalísimo para la Ciudad de México y su población, como lo es el arbolado urbano.
Hablar de este tema es apasionante, porque así como la basura, el aire, el agua, todas y todos tenemos alguna historia, algún vínculo, alguna opinión sobre el arbolado de la Ciudad de México.
Recientemente con las lluvias y la caída de los árboles, su presencia se ha impuesto, pero también el debate sobre su manejo.
En el ejercicio de Casa por Casa de todos los jueves, en donde la jefa de Gobierno va tocando y preguntándole a la gente qué necesita, se ha dejado ver el tema del arbolado urbano, como una de las principales inquietudes de la población.
El muérdago parece también ya parte del lenguaje cotidiano de la gente de la Ciudad de México. Incluso la Ciudad de México se puede contar a través de su arbolado.
Imagínense si este ahuehuete que está aquí atrás pudiera hablar, todo lo que nos podría contar de lo que ha pasado en esta ciudad en 700 años de vida.
También podemos hablar del paso de la Ciudad de México por principios del siglo XX, cuando llegaron las jacarandas, cuya introducción se atribuye al jardinero japonés Matsumoto, a quien se estableció en México en finales del siglo XIX, y desde entonces los capitalinos esperamos cada primavera, para que las jacarandas nos regalen un espectáculo morado al ritmo del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer.
También la ciudad podría contarse con la introducción de ahora en retrospectiva, desafortunadas especies, como los eucaliptos, que en una época fueron famosos por su rápido crecimiento, pero hoy sabemos que tienen más perjuicios que beneficios para las ciudades.
También esperemos que en unos años, pase la historia esta época. La época, desde hace algunos años, con el segundo piso de la Transformación de la Ciudad de México, como la época en la que se introdujeron árboles nativos, resilientes y que están adaptados a las condiciones climáticas de la Ciudad de México, y que no son especies introducidas exóticas, que nos traen diversos problemas.
Hablar del arbolado urbano de la ciudad, es también hablar de la desigualdad social. Está más que estudiado, que las áreas arboladas de la ciudad están directamente relacionadas con las colonias de mayor valor adquisitivo, mientras que las colonias de mayor desigualdad están directamente relacionadas con el gris, con la ausencia del verde.
Es decir, hablar del arbolado urbano en la Ciudad de México, es también un acto de justicia social y una responsabilidad por romper el elitismo verde.
Nos alegramos de que alcaldías como Miguel Hidalgo, por ejemplo, su población tenga acceso a áreas verdes al por mayor. Pero no podemos permitir que, mientras existan estas alcaldías densamente verdes, haya otras como Iztacalco, que es la que tiene menor acceso a áreas verdes de la Ciudad de México.
El arbolado urbano, pues, no puede ser nunca más un tema de élite. Hablar del arbolado, entonces, es también la democratización del acceso al verde. El derecho humano al medio ambiente sano, que no esté determinado por el lugar de nacimiento. Hablar del arbolado urbano es apasionante y nunca será suficiente para abordarlo todo, pero para terminar, solamente decir que hay claridad en el rumbo del segundo piso de la transformación en este tema.
La jefa de Gobierno ha instruido reverdecer la Ciudad de México. Por ello, el programa que recientemente presentó de Manzanas Verdes, la inversión millonaria en los Viveros maravillosos, que el próximo año cumplen 50 años de prestarle servicios a la Ciudad de México, de dotar de plantas y árboles a las zonas urbanas de la Ciudad de México, y con la máxima coordinación con las alcaldías y con la Secretaría de Obras y Servicios, estaremos por instrucciones de la jefa de Gobierno, tratando de manera adecuada el arbolado urbano de la Ciudad de México y reverdeciendo la Ciudad de México.
A esas instrucciones que nos ha dado, hoy se suma el instrumento que en breve presentará la jefa de Gobierno, que les aseguro será un parteaguas y nos pondré a la vanguardia de las grandes ciudades comprometidas con los árboles.
Una guía fundamental para tomar decisiones acertadas en política pública del arbolado urbano.
Cierro diciendo que hoy, este ahuehuete maravilloso que está detrás de nosotros, enfrente de ustedes, será testigo de otro capítulo en la historia de sus semejantes en la ciudad.
Hoy, este viejo del agua, atestigua el compromiso con el arbolado urbano, con su manejo, con su saneamiento, y con el paradigma mundial en donde nunca más esté peleado el desarrollo económico con el desarrollo sustentable.
Gracias especiales a los viveristas, que durante años han trabajado en los viveros que dotan de arbolado y de plantas, a la Ciudad de México.
A las organizaciones de arboristas, a los podadores, a las podadoras certificadas, y aquí a una representación de ellas, a los jefes de brigada y a quienes durante años han plantado y han cuidado los árboles de la Ciudad de México.
Especialmente a Líber Saltijeral y a todo el equipo de Infraestructura Verde, que durante muchos meses, incluso años, han esperado el reconocimiento de declaratorias que acompañarán este momento.
Gracias, viejo del agua. Que tu manto siga siendo testigo de la historia de esta ciudad y nos siga llenando de sabiduría a esta comunidad, a la alcaldía Azcapotzalco y a la capital, que hace realidad las utopías por muchos, muchos, muchos años más.
Muchas gracias.
PRESENTADOR: Nuestra secretaria del Medio Ambiente hace entrega del logotipo que estará definiendo los árboles patrimoniales de nuestra Ciudad de México, a nuestra jefa de Gobierno.
Finalmente solicitamos a nuestra jefa de Gobierno, a nuestra alcaldesa en Azcapotzalco, trasladarse a donde se ubica la placa que estaremos develando con la cuenta de acompañamiento.
Y si nos ayudan, por favor, con una cuenta en regresiva, para poder develar la placa del Viejo de Agua. 5, 4, 3, 2, 1…
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VIDEO: MEMORIAS DE LA COMUNIDAD DEL PUEBLO DE SANTA CATARINA, AL COBIJO DEL VIEJO DEL AGUA.
TESTIMONIO: Estamos en el pueblo de Santa Catarina, alcaldía Azcapotzalco.
TESTIMONIO: Ya tengo aquí 50 años, estoy a un lado de lo que es el ahuehuete, que es un orgullo de Santa Catarina. Lo consideramos un patrimonio.
Aquí al ahuehuete se le cuida. Cuando vemos que le hace falta agua, lo que hacemos es avisar a la alcaldía y mandan lo que es la pipa, para que se mantenga, que se mantenga vivo.
TESTIMONIO: El ahuehuete era nuestra diversión como niño. Tenía agua, tenía como un río fluyendo agua y había pescados. Los niños salíamos y jugábamos; nos encantaba estar allí en el lago. Es un orgullo de aquí de Santa Catarina, ¿por qué? Porque es historia.
TESTIMONIO: Yo tengo ahorita de 1970 para acá. Este ahuehuete tiene 700 años nada más. Es el único que queda en Azcapotzalco; ya no hay de estos árboles.
TESTIMONIO: Ya tengo 54 años aquí. Yo al ahuehuete tengo bastantes años conociéndolo. Deben de cuidarlo, porque es un árbol que nos da sombra. Hasta la fecha todavía venimos aquí a platicar a la sombra del ahuehuete.
TESTIMONIO: Y hay veces que los niños mismos se meten y lo abrazan con sus pequeñas manitas, juegan alrededor de él.
TESTIMONIO: Yo hoy tengo 61 años y medio, nacimos aquí desde la primaria, desde que íbamos al kinder, siempre pasábamos por aquí. Para mí es un emblema y es algo que me causa mucha satisfacción, de pasar por aquí o de verlo. Incluso muchas veces algunos de mis amigos los invitaba, para que vinieran a ver el sello de Santa Catarina, que vinieran a ver el ahuehuete. Antes tenía dos, dos pararrayos. Las raíces del árbol, del ahuehuete llegaban en un promedio de 200, 150, 200 metros.
TESTIMONIO: Son nuestros pulmones, es nuestra respiración, es lo que nos mantiene con salud.
TESTIMONIO: Yo quiero mucho al árbol porque es lo que nos da vida, su aire, su convivencia porque también aquí convivimos. Pues a seguirlo cuidando; que prosperes más y sigas uniéndonos como pueblo, seguimos luchando por ti.
TESTIMONIO: Quiéranlo, porque es un patrimonio ya. Gracias por el apoyo.
TESTIMONIO: Que realmente nos preocupemos más por nuestros árboles, pues ahorita en tiempo de frío, de lluvias, está bien, está excelente. Pero en tiempo de calores, a nuestros niños les enseñan a respetar, que no avienten tanta porquería adentro. A los jóvenes, a los que se vienen a sentar aquí, que tengan respeto.
TESTIMONIO: Que realmente cuidemos la flora y la fauna. Que respeten el ahuehuete y porque es un árbol que nos protege bastante. Tengan respeto hacia a él; que no echen basura, que no tiren botellas, envases. Más que nada el respeto al árbol. Él no se puede defender.
TESTIMONIO: Que no se deje vencer. que siga igual alimentándose de esa vida de sus habitantes, porque sí habemos gente que vamos a luchar por él, que vamos a luchar por ese patrimonio tan hermoso que es un ahuehuete.
Gobierno de la Ciudad de México, capital de la Transformación.