Mensaje de la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina; y otras funcionarias, durante la presentacion de la bandera de la diversidad más grande del mundo en el Zócalo capitalino
JEFA DE GOBIERNO, CLARA BRUGADA MOLINA (CBM): Estamos nuevamente en este glorioso Zócalo, hoy vestido con los colores de la diversidad, pero yo quiero primeramente saludar a todo este hermoso, hermose, hermosa presídium, que nos acompañan mujeres, que nos acompañan hombres, que nos acompaña personas que deciden ser quienes quieren ser.
Así que, hoy estamos aquí reivindicando la diversidad y haciendo la bandera más grande del mundo.
Pero antes de hablar sobre este tema, quiero hablar sobre lo que pasa en el mundo, y no podemos quedarnos calladas, callados, callades; así que, somos y nos declaramos una ciudad pacifista.
Ante los graves momentos que vive el mundo: Condenamos toda forma de violencia, toda forma de agresión, de violación a los derechos humanos, de transgresión del derecho internacional, así como de los más elementales componentes del derecho humanitario.
Hoy, más que nunca, son vigentes y asumimos con fuerza los principios constitucionales que rigen la política exterior de nuestro país, que el día de hoy nuestra presidenta Claudia Sheinbaum nos recordó –como– la ruta para buscar y encontrar la paz entre las naciones, para encontrar la paz entre los pueblos.
Hoy nos pronunciamos a favor de estos principios.
La acción internacional de los gobiernos del pueblo, de los pueblos, debe respetar la no intervención, la autodeterminación de los pueblos, la solución pacífica de las controversias, la proscripción de la amenaza o el uso de la fuerza en las relaciones internacionales, igualdad jurídica de los estados, cooperación internacional para el desarrollo, respeto, protección y promoción de los derechos humanos, así como la lucha por la paz y la seguridad internacional.
La paz es un bien público global, una condición de bienestar y de desarrollo; la paz es un piso básico que debe regir la convivencia entre las personas, las comunidades, los países y los pueblos.
Por ello, la construcción de la paz y su defensa es una tarea permanente y una responsabilidad común. No puede ni debe ocultarse la gravedad de los acontecimientos en Medio Oriente y otras regiones del mundo.
La construcción, la protección y la defensa de la paz es hoy una tarea urgente.
La Ciudad de México, como ciudad global, asume su compromiso de contribuir a la causa de la paz de la mano del Gobierno de México y de la extensa red de ciudades en el mundo, que exigimos, que levantamos la voz para exigir alto inmediato a la guerra y a la vigencia plena del derecho internacional.
Y en medio de la guerra, del sufrimiento, de la falta de diálogo y la imperante necesidad de resolución pacífica de los conflictos entre las naciones, hoy, la Ciudad de México decide levantar la Bandera de la Diversidad Sexual como un símbolo, como la bandera que llama también a la paz en medio del mes de junio, del mes del orgullo.
Hablar de paz es hablar de la exigencia del respeto a la otra persona, a ser como quiera ser y quien quiera ser, es hablar de paz en esta ciudad, es hablar de que en esta ciudad el amor es amor y se respeta, se festeja, se protege y se cuida.
El día de hoy un grito de paz nace en el Zócalo de esta gran Ciudad de México. Esta paz envuelta en los colores de la diversidad sexual que hoy se manifiestan en este gran Zócalo.
Con este acto transformamos el Zócalo de la Ciudad de México, también en un símbolo de la inclusión, del respeto y del orgullo.
Aquí, donde se concentra la vida política, pública, cultural de nuestra nación, decimos con firmeza: El corazón de la Ciudad de México y el corazón de nuestro país es el corazón de la diversidad; y es también, el corazón de la paz.
Y desde este corazón levantamos la Bandera de la Diversidad más grande del mundo.
La Ciudad de México es y seguirá siendo la ciudad de los derechos y de las libertades.
Y que esta imagen monumental que hoy dibujamos con nuestros cuerpos y con nuestros colores, sea también un mensaje poderoso al país y al mundo: La Ciudad de México es Capital del Orgullo, es Capital de la Diversidad, Capital de la Paz y la Capital de la Transformación.
¡Que viva la diversidad sexual! ¡Que viva el respeto a los derechos humanos! ¡Que viva la paz! Gracias.
SECRETARIA DE CULTURA, ANA FRANCIS LÓPEZ BAYGHEN PATIÑO (AFLBP): Muchas, muchas gracias.
Muy buenas tardes, bienvenidas y bienvenidos todos, todas, todes a esta hermosísima Bandera de la Diversidad.
Con esto queda muy claro cuál es la energía, la posición de nuestra ciudad: de abrazo a la diversidad.
Desde la secretaría de Cultura, y por instrucciones de la jefa de Gobierno, permearemos toda la programación, permearemos todas las actividades de la Secretaría con la inclusión, no solamente a la diversidad, sino a todas las poblaciones, pero ésta es muy importante.
Así que, muchas gracias por darle la bienvenida al mundo con esta bandera, de esta forma: desde el amor, desde la diversidad, desde el juego, desde la fiesta, desde el baile.
Muchas gracias por contribuir a ser ejemplo del mundo.
Buenos días, Gracias.
TITULAR DE UNIDAD DE ATENCIÓN A LA DIVERSIDAD SEXUAL, HILDA TÉLLEZ LINO (HTL): Gracias.
Muy buen día a todas, todos y todes en esta hermosa mañana.
Saludo con muchísimo cariño a nuestra jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, y a todas, y todos quienes integran este panel y quienes hoy nos acompañan en esta maravillosa convocatoria.
¡Qué mañana más bella!, donde somos mucho más que un color que nos une uno a otro, a otre, para formar esta gran bandera. Somos luchas e identidades con orgullo y libertad.
Esta no es una bandera cualquiera, en esta ciudad, nuestra jefa nos enseña a soñar en grande, y por eso esta bandera es la más grande, y también es la más viva, la más sentida y la más intensa, pues en cada color palpita la memoria de quienes nos antecedieron, de quienes con valentía abrieron cambios, enfrentaron el estigma, resistieron el odio y sembraron dignidad.
Hay ausencias que duelen, sí; y a ellas las honramos, las voces que no están, pero también hay presencias que celebramos, de quienes hoy podemos nombrarnos, amarnos y existir con más libertad: !La libertad del amor!
Desde la Unidad de Atención a la Diversidad Sexual y bajo el firme compromiso de nuestra jefa de Gobierno, Clara Brugada, trabajamos porque esta ciudad sea realmente la casa de todas, todos y todes.
Una ciudad donde ser lesbiana, ser gay bisexual, trans, intersexual, no binarie o queer no sea un riesgo, sino una alegría, una ciudad donde la diferencia no nos divida, nos enriquezca.
Hoy quiero invitarles a mirarnos entre nosotras, nosotros, nosotres a reconocernos, a cuidarnos más.
Las disidencias sexuales no somos enemigas entre sí, debemos ser aliadas en la construcción de un mundo más justo, y hoy más que nunca necesitamos unidad, ternura y puentes de amor entre nuestras propias comunidades.
Que esta bandera sea eso, un símbolo visible y gigantesco de que existimos, resistimos y que amamos en libertad.
Gracias.