Mensaje del Jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, durante la presentación de la publicación de la ley del derecho al bienestar e igualdad social.

Publicado el 15 Julio 2024

JEFE DE GOBIERNO, MARTÍ BATRES GUADARRAMA (MBG): Muchas gracias. Muchas gracias, amigas, amigos. Saludo a todos los que están presentes aquí en este patio y a todas las personas que están también en el otro patio, que también está lleno, todas, todos, todes bienvenidos a este momento importante.

Me complace compartir con ustedes la publicación de la nueva Ley del Derecho al Bienestar e Igualdad Social para la Ciudad de México, salió publicada hoy en la Gaceta Oficial del Gobierno de la Ciudad de México; y evidentemente no es cualquier ley y no quisimos que pasara esto como un trámite burocrático, sino que quisimos darle el realce, la importancia que tiene.

Esta Ley sustituye a la Ley de Desarrollo Social para el Distrito Federal, que ya era avanzada. De hecho, como presidente de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, me correspondió la aprobación de la primera Ley de Desarrollo Social en el año 2000; hacia el 2005, durante el gobierno del licenciado López Obrador como Jefe de Gobierno, se reformó; y en el 2008, cuando fui secretario de Desarrollo Social del Gobierno de la Ciudad, se volvió a reformar para incorporar la creación del Consejo de Evaluación de la Política Social, que encabezó Pablo Yanes, aquí presente.

Hoy presentamos una ley que establece entre sus objetivos fundamentales, algunos de los siguientes: garantizar el derecho al bienestar, que significa gozar de una vida digna para desarrollar las capacidades, vivir libres de pobreza y alcanzar el pleno florecimiento del desarrollo y la autonomía.

Brindar herramientas a la administración pública para cumplir con la responsabilidad social del Estado. La responsabilidad del bienestar no es una responsabilidad individual, es una responsabilidad del Estado.

Establecer el Sistema General de Bienestar Social de la Ciudad de México. Disminuir los factores que fomentan la desigualdad. Establecer e impulsar políticas públicas orientadas al logro de los derechos. Establecer e impulsar políticas de igualdad y bienestar, con la participación de todas las personas, tanto individualmente como colectivamente.

Revertir los procesos de segregación socio-territorial. Organizar la prestación de servicios públicos universales, gratuitos, accesibles, suficientes, de calidad. Coadyuvar al ejercicio del derecho a la ciudad, entendiendo por ello el uso, el usufructo pleno y equitativo de todo lo que significa la ciudad como servicios y espacios de calidad.

Fomentar la reconstrucción del tejido social. Establecer criterios para la formulación anual del presupuesto en materia de bienestar. Fomentar las propuestas de organizaciones de la ciudadanía en el diseño, monitoreo y evaluación de las políticas. Definir los mecanismos y procedimientos que garanticen la exigibilidad de los derechos.

Ahora bien, para lograr estos objetivos que buscan elevar las condiciones concretas de vida de las personas, las familias, las comunidades, se establecen ciertos principios, por ejemplo, la universalidad de las políticas sociales; la progresividad y no regresividad, esto quiere decir que se pueden modificar todas las leyes sociales siempre y cuando sea para agregar, nunca para quitar; la exigibilidad, o sea la posibilidad de que las políticas sociales se transformen en derechos y puedan ser exigibles desde el punto de vista de la justicia.

La igualdad, entendiendo por igualdad no solo la igualdad ante la ley, que es una igualdad elemental, sino la igualdad real, la igualdad sustantiva, la igualdad de derechos; el enfoque de derechos, es decir, que las políticas sociales no aparezcan ni desaparezcan, que no sean para pequeños grupos, sino que sean para todas y para todos, permanentes, libres, accesibles.

La diversidad, que es el reconocimiento de las diferencias que hay de sexos, géneros, orientaciones, identidades, territorios; y, la participación, el derecho de las personas, comunidades, organizaciones para participar en el diseño, seguimiento, aplicación, evaluación de las políticas de bienestar.

Para lograr estos objetivos, para cumplir con estos principios la Ley enumera temas concretos, como los temas relacionados con pobreza, discriminación, alimentación, educación, salud, tiempo libre de calidad, servicios públicos, espacios públicos, políticas de cuidado, vivienda digna para sí y para la familia, agua potable, empleo digno, movilidad, conectividad digital, que también es un derecho social, no discriminación, el nivel territorial.

Y también enumera grupos específicos de atención prioritaria para el bienestar, como los grupos de migrantes, los que son víctimas de violencia de género y familiar, personas en situación de calle, niñas, niños, adolescentes, personas mayores, personas de la población LGBTTTIQ+, personas con adicciones, personas con discapacidad y también el tema del medio ambiente.

Para lograr estos objetivos, estos principios, atender estos grupos prioritarios, hay mecanismos integradores de coordinación, ejecución y planeación mucho más compactos y precisos que en la legislación anterior, es decir, se terminan con cierta dispersión institucional para tener mecanismos de ejecución, de coordinación, de decisión.

Se establece un programa especial de bienestar, un padrón unificado de beneficiarios de los programas y la articulación con las diversas instituciones, dependencias y también con las alcaldías, que sí son mencionadas aquí en esta ley.

De hecho, se establece –en relación con las alcaldías– que los programas sociales que implementen las alcaldías deberán coordinarse con las áreas correspondientes del Gobierno de la Ciudad, con el fin de unificar padrones de beneficiarios para evitar su duplicidad con el propósito de maximizar el impacto económico y social de los mismos, y para materializar lo anterior, deberán sujetarse a la normatividad que emita el Gobierno de la Ciudad de México. Es decir, hay articulación, pero también dirección, porque corresponde al Gobierno de la Ciudad dirigir toda la política de bienestar en todo el territorio de la capital.

Esta Ley es la más importante de todas las leyes, si no existiera esta Ley tendríamos una democracia institucional, pero esta Ley lo que nos dice es que nuestra democracia tiene contenido y tiene adjetivos, busca el bienestar y la igualdad social. Con esta Ley también priorizamos y atendemos, yo diría, el objetivo fundamental de la izquierda, que es la igualdad, como bien lo dijo aquí Pablo Yanes.

Además, con este conjunto de objetivos y principios, la Ley da un salto conceptual muy importante: ya no se trata solo de promover el desarrollo social, ni siquiera el desarrollo social más avanzado, se trata de construir un Estado de Bienestar Social, que ahora, con los gobiernos de la Cuarta Transformación, con Andrés Manuel López Obrador hoy como Presidente, se hace realidad, pues ha disminuido la desigualdad y ha disminuido la pobreza, lo cual quiere decir que hay un camino que está señalado que es el correcto.

Seguramente, estas transformaciones por la igualdad y el bienestar van a seguir, en el país, con la doctora Claudia Sheinbaum y, en la Ciudad de México, con la licenciada Clara Brugada Molina.

Agradezco mucho la presencia de compañeras y compañeros que están encargados de coordinar diversos programas sociales en la Ciudad de México; de personas beneficiarias de diversos programas que nos acompañan también; del secretario de Bienestar Social, Juan Gerardo López.

Del maestro Pablo Yanes Rizo, que prácticamente ha acompañado el proceso de construcción de nuestra idea de la cuestión social desde el primer gobierno democrático, porque fue director de Equidad y Desarrollo Social en el gobierno del ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas, y después fue funcionario también en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, y conmigo trabajó también en la Secretaría de Desarrollo Social, en la época en que fue Jefe de Gobierno el licenciado Marcelo Ebrard, él tiene mucho que ver con lo que hemos construido conceptualmente en la Ciudad de México. Ya no digamos que es consultor internacional, es mi consultor principal en los temas sociales.

También agradezco mucho la presencia de la diputada Martha Ávila, espero que no haya celos, pero es mi diputada favorita; y, por supuesto, agradezco mucho la presencia de muchas diputadas y diputados que están el día de hoy aquí. Especialmente se los agradezco, no tan incondicionalmente, se los agradezco porque voy a seguir enviando iniciativas, todavía les queda todo julio, todo agosto, bueno, la mitad de julio y todo agosto para seguir legislando y la verdad han aprobado muchas iniciativas y leyes muy importantes para la ciudad.

A veces encontramos que algún medio dice, mide la importancia de las aprobaciones de los órganos legislativos por el número: “se presentaron mil iniciativas, pero solo se han aprobado 500”, dicen; no, lo más importante es qué aprueban y qué beneficios tiene para la sociedad.

Yo, la verdad, como Jefe de Gobierno estoy muy contento con esta Legislatura, ya estaba contento como secretario de Gobierno, ahora como Jefe de Gobierno estoy más contento con esta Legislatura por las decisiones que ha tomado, trascendentes, a las que hemos buscado darles la mayor proyección y difusión.

Quiero comentarles de paso que en estos días voy a enviar unas iniciativas de reforma constitucional, que tienen que ver con los debates que hay en estos momentos, no adelanto temas, porque me interesa la difusión de la Ley que hoy se ha publicado, pero ya les pediré que puedan enlistar su presentación para los próximos días.

De antemano, amigas, amigos legisladores, muchas gracias. Como he dicho aquí, desde el primer informe que presenté de carácter mensual, no estamos aquí para administrar, estamos aquí para transformar y para mí cada día cuenta para la transformación, y si nos quedan aquí 75… no, nos quedan 80 días, esos 80 días serán para la transformación de la Ciudad de México.

Muchas gracias. Gracias, amigas, amigos, abrazo fuerte.

SECRETARIO DE INCLUSIÓN Y BIENESTAR SOCIAL, JUAN GERARDO LÓPEZ HERNÁNDEZ (JGLH): Muchas gracias. Con el permiso de nuestro Jefe de Gobierno, del doctor Martí Batres Guadarrama, muy buenos días a todas, todos y todes.

Hoy es un día muy importante para la ciudad y para la historia de las luchas de esta entidad, porque todo el proceso de transformación de nuestra ciudad se ha construido en torno de ganar y defender los derechos sociales: los derechos a la vivienda, los derechos a la educación, a la salud, a la seguridad social, a la participación en la vida pública, a la democratización en general.

Y entonces hoy que se publica esta Ley del Derecho al Bienestar y a la Igualdad Social de la Ciudad de México, en sus 82 artículos y sus tres títulos se plasma una buena parte de nuestra historia.

Y vale la pena poner el acento en dos temas, uno que se incluye es la creación de un Sistema General del Bienestar Social como una instancia donde participan diversas instituciones públicas, es decir, no solo una, no solo aquellas que pareciera directamente que están implicadas, como en el caso actual la Secretaría de Inclusión y Bienestar Social, sino muchas otras, incluidos importantes actores sociales.

Y además también todo el capítulo que tiene que ver con la planeación y la programación del sistema como un ejercicio democrático y participativo, donde tienen que estar presentes, por supuesto, las autoridades, pero primordialmente las organizaciones y la ciudadanía.

Solamente me resta agradecer la presencia, pero, sobre todo la participación de nuestras diputadas y diputados del Congreso de la Ciudad de México, para quienes pido un aplauso, hoy nos acompaña un nutrido grupo de ellos; y por supuesto que también al doctor Pablo Yanes Rizo, quien es un destacado académico, un luchador social y un actor indispensable en toda esta historia de la lucha por la construcción de los derechos sociales y la democracia en nuestra ciudad.

Bienvenidas todas y todos.

DIPUTADA EN EL CONGRESO DE LA CIUDAD DE MÉXICO, MARTHA ÁVILA VENTURA (MAV): Muchas gracias, buenos días a todas, a todos, a todes.

Saludo de manera afectuosa a nuestro Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, el doctor Martí Batres Guadarrama; así como a las y los invitados especiales, y a todas las personas que hoy nos acompañan.

La Ciudad de México se ha caracterizado por impulsar el reconocimiento y la ampliación de derechos, tanto individuales como colectivos, poniendo por delante a quienes menos tienen.

Leales a esa trayectoria, en días recientes, gracias a la permanente colaboración entre poderes, en el Congreso de la Ciudad de México aprobamos la iniciativa presentada por el doctor Martí Batres para expedir la Ley del Bienestar e Igualdad Social que hoy está publicada.

Gracias a esta Ley, hoy las y los capitalinos cuentan con un marco jurídico más robusto para garantizar una vida digna; este decreto es un paso más para combatir y erradicar la pobreza y así consolidar un verdadero Estado de Bienestar, como ya lo manifestó nuestro compañero y amigo Pablo Yanes.

Con este nuevo ordenamiento, impulsado por nuestro Jefe de Gobierno y respaldado por el grupo parlamentario de MORENA y nuestros aliados que estamos en el Congreso, se pudo cumplir con la responsabilidad social y establecer un Sistema General de Bienestar en la capital.

En ese contexto, refrendamos el reconocimiento al Jefe de Gobierno, el doctor Martí Batres, porque encabeza un Gobierno con Acento Social, porque a un año del inicio de su gestión al frente del ejecutivo capitalino, ha consolidado importantes avances en materia de derechos sociales y, porque, con el conjunto de iniciativas que nos ha enviado, robustece a las instituciones para garantizar cabalmente los derechos sociales del pueblo y con ello mejorar de manera consistente las condiciones de vida del pueblo de la Ciudad de México.

Gracias a ello, los gobiernos venideros contarán con los instrumentos necesarios para que se facilite el cumplimiento de sus obligaciones sociales.

Quiero reiterar y enfatizar que esta Ley salvaguarda y garantiza las facultades de las alcaldías para instrumentar sus propios programas sociales en beneficio de los habitantes de su demarcación. Además, se fortalecerá la coordinación de los diversos órdenes de gobierno facultados para implementar acciones sociales, ello evitará la duplicidad de programas sociales y maximizará el impacto económico y social de los mismos.

Se trata de una Ley elaborada con un enfoque de derechos que privilegia la inclusión y protección de los grupos de atención prioritario en un ordenamiento que, por un lado, esclarece y refuerza las competencias de las autoridades para garantizar los derechos sociales y, por el otro, favorece las capacidades de los titulares de derechos para ejercerlos.

A través del principio de igualdad y no discriminación, del reconocimiento de la diversidad y la participación de las comunidades en la elaboración de políticas públicas, las y los capitalinos podrán participar activamente en la construcción de las acciones sociales del gobierno.

Aunque la aprobación de esta Ley enfrentó resistencias y campañas de desinformación por parte de la derecha, gracias al trabajo coordinado del Gobierno central con el grupo parlamentario de MORENA y nuestros aliados, logramos superar los desafíos y salimos adelante con su aprobación, que se reflejará en un mejor nivel de vida de las y los capitalinos.

En la fase final de la dictaminación y aprobación de esta importante iniciativa, desde la presidencia de la Junta de Coordinación Política, logramos construir los acuerdos necesarios para convertir en una realidad esta relevante propuesta del Jefe de Gobierno, en beneficio de los capitalinos.

De esta manera, con los entendimientos en la JUCOPO y con el impulso de las y los diputados de nuestro grupo parlamentario y aliados, conseguimos materializar derechos sociales y que empujado nuestro proyecto de la Cuarta Transformación en la Ciudad de México, que es la nueva Ley del Derecho al Bienestar y a la Igualdad Social.

También quiero aprovechar esta oportunidad para refrendar, a nombre de las y los diputados de MORENA y nuestros aliados en la Ciudad de México, nuestra convicción y compromiso para seguir consolidando un Estado social y de derecho, en beneficio de las y los habitantes de nuestra ciudad capital.

Seguiremos trabajando de manera estrecha y coordinada con el gobierno que hoy encabeza nuestro doctor Martí Batres Guadarrama, para seguir robusteciendo las transformaciones sociales, pues esa es la vocación y el compromiso con el pueblo capitalino.

No me queda más que agradecer y felicitar ampliamente al Jefe de Gobierno por esta iniciativa, que ya es una realidad en nuestro orden jurídico, y por las demás acciones que han convertido a nuestra ciudad en un referente ineludible a nivel nacional, como un gobierno progresista y de izquierda, que coloca a la gente al centro de las prioridades de la gestión pública.

Muchas gracias a todas y a todos.

CONSULTOR INTERNACIONAL Y ACADÉMICO, PABLO YANES RIZO (PYR): Bueno, lo de consultor internacional es porque este trabajo lo hice cuando trabajaba en la CEPAL y nos pidieron una cooperación técnica por parte del Gobierno de la Ciudad.

Miren, hoy es un día muy importante porque se publica un cuerpo legislativo que sintetiza la innovación, los derechos y el acento social; es una iniciativa que coloca en una mirada de largo aliento la política social.

Veamos el nombre de la ley: el bienestar como derecho, no como una política o un programa, el bienestar como un derecho, por eso se llama “Derecho al Bienestar”. Y es un derecho que por su propia naturaleza agrupa todos los derechos, porque el bienestar es multidimensional o no es bienestar, tiene que ver con las dimensiones económicas, sociales, culturales, ambientales.

Y, por otro lado, la ley pone de manera explícita, clara y categórica la aspiración por la igualdad; va más allá de la idea de la inclusión, plantea que el gran objetivo de la política social es el logro de la igualdad social que, por cierto, ha sido el concepto definitorio de la izquierda a lo largo de siglos, no solo queremos que haya inclusión en estructuras sociales injustas, queremos que haya igualdad social.

Por eso no es simplemente un cambio de nombre, es reforzar una mirada, la mirada de los derechos y la mirada de la igualdad, seguramente esto va a seguir abriendo camino en el país y en América Latina, no me queda duda al respecto.

Por otro lado, es una ley que se nutre de pensamiento de frontera, por eso van a encontrar innovaciones tan importantes como sistema público de cuidados, pobreza de tiempo, florecimiento humano, fuentes del bienestar, que construyen una aproximación a una política social ambiciosa, que busca no solo la satisfacción de las necesidades básicas, sino el pleno desarrollo de las personas y de las comunidades, que asume que en materia social nunca hay que darse por satisfecho y cuando se conquistan y se logran ciertos derechos, ciertos beneficios, lo que hay que pensar es en lo que sigue, porque uno de los principios que está claramente definido en esta legislación es el de la progresividad y no regresividad.

Es potente el capítulo de principios de la ley que señala, además de lo ya mencionado, la universalidad, la exigibilidad, la igualdad sustantiva, el interés superior de la infancia, la participación, entre otros. Es decir, una mirada de la política social que está en el centro de la acción del gobierno y no en los márgenes de la acción del gobierno; centralidad de la política social y no intervenciones residuales o periféricas.

Entonces, en ese sentido es una carta de navegación, no solo es un cuerpo normativo, sino que produce una perspectiva hacia dónde puede y debe ir avanzando la política social, en donde la política social y el bienestar no se reducen a programas sociales, la política social y las políticas de bienestar incluyen programas sociales, pero son más que programas sociales.

Por eso, lo que se ha planteado el Gobierno de la Ciudad de manera muy clara es construir el Estado de Bienestar, que incluirá, efectivamente, programas y una serie de medidas de política, pero también desarrollo institucional, acceso a servicios, transformación del espacio público, elevación de la calidad de vida territorial.

Entonces, en ese sentido me parece que la ley que hoy se publica efectivamente tiene una mirada de largo aliento, está llamada a perdurar porque sus objetivos son objetivos muy ambiciosos.

Por ejemplo, plantea el derecho a una vida libre de pobreza, no solo de pobreza extrema, por una vida libre de pobreza, es decir, superar el fatalismo respecto a la pobreza, que pareciera que es ya un elemento consustancial de la sociedad y que no se puede superar; pues sí se puede superar y hay que plantearse su superación, hay que romper con esta normalización de la pobreza en donde casi la gente cree que es más fácil que se acabe el mundo a que se acabe la pobreza.

Vida libre de pobreza, vida libre de violencia, vida libre de discriminación, entonces es un esfuerzo, una convocatoria a movilizar todos los recursos en función de elevar el bienestar de todas las personas.

Y, por último, cerrar lo que podemos llamar “la brecha del bienestar”. La Ciudad de México es la séptima economía de América Latina, es la economía 35 del mundo, es una economía muy grande, es un jugador global, el pastel ya creció mucho, con este tamaño de pastel yo estoy convencido de que podemos lograr niveles de bienestar muy superiores para la población de la Ciudad de México, y creo que en eso ha estado empeñado este gobierno y seguramente el gobierno de Clara Brugada va a cumplir y va a cumplir con creces.

Gracias.